Muchas personas con diabetes sienten que les resulta difícil controlar sus niveles de azúcar en sangre durante el invierno. Entonces, ¿cómo pueden afrontar los desafíos del invierno las personas con diabetes?
Participa activamente en la prevención y el tratamiento de los resfriados.
En comparación con la población general, las personas con diabetes tienen más dificultades para prevenir los resfriados. El invierno es la época de mayor incidencia de gripe, por lo que mantenerse abrigado es fundamental. Las personas con diabetes deben prestar atención a la ropa que se añade o se quita y a la ventilación de la habitación.
En caso de que un paciente diabético contraiga un resfriado, deberá controlar con mayor atención las variaciones en sus niveles de glucosa en sangre, así como los cambios en su dieta y estilo de vida, para poder ajustar la medicación oportunamente. Si no sabe cómo hacerlo, consulte con un médico de inmediato.
Sigue haciendo ejercicio y no te relajes
No es recomendable hacer ejercicio demasiado temprano ni en exceso durante el invierno. El ejercicio matutino no es adecuado para las personas con diabetes en esta época del año. El mejor momento para ejercitarse es después de que salga el sol, alrededor de las 9:00 de la mañana. La intensidad de la actividad no debe ser excesiva. Se recomiendan actividades suaves como el tai chi, caminar, trotar y otras similares. Asimismo, es importante calentar antes de hacer ejercicio y mantenerse abrigado durante el mismo para evitar resfriarse.
Las personas con diabetes necesitan remojar sus pies con más frecuencia para protegerlos.
La diabetes suele ir acompañada de trastornos circulatorios, y los pies son la parte del cuerpo más alejada del corazón. Por lo tanto, la circulación en los pies suele ser la primera y más susceptible a los efectos de la diabetes. Las personas con diabetes deben remojar sus pies con mayor frecuencia durante el invierno para favorecer la circulación sanguínea. Al remojar los pies, la temperatura del agua no debe ser demasiado alta, manteniéndose por debajo de los 40 grados, y el tiempo de remojo no debe ser excesivo.
Las personas con diabetes deben revisarse los pies con frecuencia. Algunas personas mayores tienen la piel seca en los pies. Si hay úlceras, no es recomendable remojar los pies.
Recuerda comer ligero.
Muchas personas tienen la costumbre de tomar suplementos en invierno, pero quienes padecen diabetes deben prestar atención a mantener una dieta ligera. Si desean tomar suplementos, lo mejor es hacerlo bajo supervisión médica, ya que muchos suplementos alimenticios contienen altos niveles de azúcar o grasa.
Además, el apetito suele ser mayor en invierno que en verano. Por lo tanto, los pacientes diabéticos deben controlar su ingesta de alimentos y evitar que los excesos perjudiquen su salud.
Debe haber un sistema de control de glucosa en sangre.
Generalmente, en invierno, o incluso en ciertas épocas del año, la glucemia de las personas con diabetes aumenta repentinamente. Esto se debe en gran medida a la temperatura. En general, a mayor temperatura, mayor es la producción y el consumo de calor del cuerpo. En este caso, la glucemia disminuye debido al aumento del consumo de calor corporal. Sin embargo, dado que los vasos sanguíneos se contraen en invierno, la eficiencia metabólica disminuye. La energía ingerida en esta época no se puede quemar a tiempo, y si la actividad física se reduce considerablemente, la glucemia aumentará.
Las personas con diabetes pueden detectar problemas a tiempo mediante el control regular de la glucemia y realizar los ajustes necesarios siguiendo las indicaciones de su médico. Además, es importante que tengan en cuenta que lo ideal es medir la glucemia en interiores, ya que una temperatura ambiente o una temperatura local de los dedos demasiado bajas pueden afectar la precisión de la medición. Por lo tanto, deben prestar especial atención al control de la glucemia en invierno.
El clima también influye mucho en el nivel de azúcar en sangre, por lo que las personas con diabetes deben aprender a protegerse y controlar sus niveles de azúcar en sangre durante el invierno.