La mayor preocupación para los pacientes diabéticos es el nivel de azúcar en la sangre. Las fluctuaciones en la glucemia son como una mano invisible que les aprieta el corazón. Tanto la glucemia alta como la baja afectan su estado de ánimo. Al preguntarles a qué hora del día les resulta más difícil controlar la glucemia, muchas personas con diabetes responden que por la mañana. ¿Es esta situación una coincidencia o tiene alguna explicación? Hoy, acompáñenos para descubrir las razones.
La secreción hormonal tiene un ritmo circadiano.
Jia Kebao, subdirector médico del Departamento de Endocrinología del Hospital Xuanwu de Beijing, explicó que, debido a que la secreción de hormonas glucémicas en el cuerpo humano, como la hormona del crecimiento y la adrenalina, comienza a aumentar regularmente por la mañana temprano, el organismo se prepara para un nuevo día de trabajo y actividades cotidianas. Las personas sanas pueden secretar la insulina necesaria para mantener la glucemia dentro de los rangos normales, pero en los pacientes diabéticos con menor capacidad de regulación de la glucosa, esto provoca un aumento de la glucemia matutina. De hecho, este es el conocido "fenómeno del alba". El Dr. Jia Kebao recuerda que, si la glucemia aumenta por la mañana debido al fenómeno del alba, se puede aumentar la dosis de insulina basal antes de acostarse o añadir metformina antes de dormir.
Secreción basal de insulina insuficiente
Los pacientes que reciben tratamiento con insulina deben saber que la secreción fisiológica de insulina en personas sanas consta de dos partes: la secreción basal y la secreción posprandial, que depende de si se ingieren alimentos o no. Estas secreciones representan aproximadamente el 50 % de la secreción total diaria. La secreción basal de insulina no depende de la ingesta de alimentos. Su función es evitar que el glucógeno almacenado en el hígado se descomponga en glucosa y se libere al torrente sanguíneo. También evita que los ácidos grasos y los aminoácidos se conviertan en glucosa mediante la gluconeogénesis y se liberen al torrente sanguíneo. Por lo tanto, aunque no existe un pico en la secreción basal de insulina, es fundamental para regular la hiperglucemia en ayunas y la glucemia preprandial. El Dr. Jia Kebao indicó que algunos pacientes diabéticos, especialmente aquellos con una enfermedad de larga evolución, presentan glucemia en ayunas elevada debido a una secreción basal de insulina insuficiente.
El Dr. Jia Kebao sugirió que, en pacientes con secreción basal de insulina insuficiente, se debe prestar atención al tratamiento. Se pueden ajustar los fármacos hipoglucemiantes orales que estimulan la secreción de insulina, como las sulfonilureas, o bien optar por inyecciones de insulina de acción intermedia o prolongada.
El agua potable contaminada también es la razón
El subdirector médico Jia Kebao afirmó que comer en exceso por la noche también contribuye al aumento de la glucemia en ayunas. Especialmente después de cenar, sin realizar ejercicio adecuado, es más probable que la glucemia aumente antes del desayuno. Muchos pacientes diabéticos tienen una ingesta alimentaria inadecuada, principalmente porque desconocen la cantidad de energía que necesitan diariamente. Por ello, el Dr. Jia Kebao ha elaborado una tabla para que cada persona pueda calcular sus necesidades calóricas diarias según sus circunstancias. Tres comidas al día pueden aportar un tercio de la energía diaria, el desayuno un quinto, y el almuerzo y la cena dos quintos cada uno.
