La diabetes es una enfermedad metabólica endocrina causada principalmente por una secreción insuficiente de insulina, lo que provoca un aumento del azúcar en sangre. La prevalencia de la diabetes en adultos en mi país es del 12,8%, y 1 de cada 8 personas la padece. Los jóvenes suelen pensar que la diabetes es una enfermedad que solo afecta a las personas mayores y que está muy lejos de ellos. De hecho, está peligrosamente cerca. Muchos niños incluso son diabéticos.
La proporción de adultos con prediabetes es del 35,2%, lo que significa que una de cada tres personas la padece. La diabetes es como una caja de Pandora, con más de 100 complicaciones que pueden acarrear graves consecuencias como ceguera, discapacidad en los pies e insuficiencia renal.
8 síntomas típicos de la diabetes
1. Problemas bucales
En las primeras etapas de la diabetes, los pacientes pueden presentar algunos síntomas físicos, como molestias en la boca. Entre los problemas bucales comunes causados por la diabetes se incluyen la movilidad y la caída de los dientes, la periodontitis y la gingivitis. Si se presentan molestias, dado que son causadas por una enfermedad bucal, se consideran un síntoma temprano de la diabetes.
2. Parálisis de las extremidades
Si experimenta entumecimiento o dolor intenso en manos y piernas, preste especial atención. Estos síntomas pueden deberse a la diabetes y son síntomas tempranos de esta enfermedad. Además, existen otros síntomas a los que todos deben prestar atención, como los calambres nocturnos en las pantorrillas.
3. A menudo tienen hambre
El hambre es un síntoma clave en las primeras etapas de la diabetes y suele acompañar a quienes la padecen. Si una persona sana experimenta un aumento repentino del apetito y antojo de dulces, debe prestar especial atención, ya que podría estar presentando síntomas de diabetes.
4. Pérdida de peso
Si no haces ejercicio, no tomas pastillas para adelgazar ni haces nada más, de repente bajas de peso. No te alegres demasiado, ya que esto podría ser un síntoma temprano de diabetes. En las primeras etapas de la diabetes, la glucosa en la sangre no se puede utilizar completamente, lo que provoca que quienes padecen diabetes en etapa temprana pierdan peso repentinamente.
5. Sequedad en la boca y la lengua
La sed es un síntoma temprano típico de la diabetes. En general, las personas que no suelen beber mucha agua, pero que de repente sienten una sed intensa que les impide soltar un vaso de agua, deben tener cuidado. Podría tratarse de un síntoma temprano de diabetes.
6. Estreñimiento y diarrea
Una característica de los primeros síntomas de la diabetes es que la diarrea es seguida por el estreñimiento, y viceversa, repitiéndose el ciclo. Si la diarrea y el estreñimiento se alternan, podría tratarse de un síntoma temprano de diabetes, por lo que conviene acudir al hospital para obtener un diagnóstico a tiempo.
Causas de la descontrolada glucemia en la diabetes
Ya sabes, no son solo los medicamentos los que afectan al azúcar en sangre, hay muchas otras razones.
01 Dieta inadecuada
La sobrealimentación prolongada provoca una sobrecarga y fatiga prolongada de las células beta de los islotes pancreáticos, encargadas de la secreción de insulina, lo que causa una disfunción en la secreción de insulina. Esto es especialmente cierto en personas con predisposición genética a la diabetes, quienes tienen mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.
Además, es más probable que la sobrealimentación prolongada cause una acumulación excesiva de insulina en el cuerpo en personas con factores de resistencia a la insulina como obesidad, presión arterial alta, hiperlipidemia, hiperuricemia, etc., lo que resulta en hiperinsulinemia.
También debes prestar atención al tipo de dieta. Si consumes alimentos con alto contenido en carbohidratos y un índice glucémico elevado (haz clic para ver: índice glucémico de 312 alimentos comunes), como pan, patatas, fideos, gachas y otros alimentos similares, tu nivel de azúcar en sangre aumentará rápidamente.El consumo de alcohol reduce temporalmente el nivel de azúcar en sangre, y luego lo aumenta significativamente.
De hecho, el ajuste de la dieta es la base del tratamiento de los pacientes diabéticos. La dieta diaria de estos pacientes debe seguir el principio de "controlar la cantidad total y equilibrar los nutrientes". Al igual que el tratamiento farmacológico, el control dietético de la diabetes debe mantenerse durante toda la vida.
02 Mal sueño
Las personas que no duermen bien o duermen poco tienen mayor probabilidad de desarrollar diabetes. Un estudio publicado en el American Journal of Pediatrics muestra que los adolescentes que duermen menos de 8 horas por noche pueden acumular grasa en la parte superior del abdomen y disminuir la sensibilidad a la insulina, lo que aumenta el riesgo de diabetes tipo 2.
Los investigadores creen que podría existir una correlación entre la privación del sueño y los trastornos metabólicos. Una reducción prolongada de dos horas de sueño al día puede provocar una disminución de la sensibilidad a la insulina. Otro estudio muestra que las personas que duermen mucho tienen más probabilidades de desarrollar diabetes que quienes duermen lo suficiente.
Realizar los preparativos adecuados antes de acostarse puede mejorar eficazmente la calidad del sueño.
Aquí hay algunas sugerencias:
Las frutas se utilizan como arroz y las bebidas como agua.
Cuando hace calor, aunque se les pongan platos deliciosos delante, no es fácil que les entre el apetito. Algunas personas comen principalmente frutas y bebidas, a menudo en abundancia, como sandía y melocotones, para saciar el hambre.
Entre la gran variedad de bebidas de frutas, muchas tienen un alto contenido de azúcar. Las personas con diabetes pueden desarrollar la enfermedad al consumir estas bebidas.
Además, el hierro no hemo de las frutas es difícil de asimilar para el organismo. El consumo prolongado de frutas no solo puede provocar hiperglucemia, sino también una ingesta insuficiente de proteínas y hierro, lo que conlleva anemia y debilitamiento del sistema inmunitario.
04 Exceso de hierro = 2,3 veces el riesgo de diabetes
El exceso de hierro acumulado en el cuerpo también puede provocar diabetes tipo 2, por lo que un análisis de sangre temprano puede ayudar a identificar a las personas en riesgo.
La ferritina es un complejo de hierro y proteínas en la sangre y es un marcador de la acumulación de hierro.
El profesor Ma Xianghua, del Departamento de Endocrinología del Hospital Popular Provincial de Jiangsu, lleva unos años estudiando el impacto de la sobrecarga de hierro en la diabetes. Analizaron a 35 pacientes con esteatosis hepática no alcohólica y a 56 sujetos sanos. Tras medir diversos indicadores, analizaron específicamente sus niveles de insulina.
Los resultados mostraron que las personas con niveles más altos de ferritina en sus cuerpos presentaban una resistencia a la insulina más severa.
05 Falta de vitamina E
El cuerpo humano carece de vitamina E y es propenso a la diabetes.
Un equipo de investigación finlandés realizó un seguimiento a hombres sanos de mediana edad durante cuatro años. Durante el período de observación, los hombres con bajos niveles de vitamina E en su organismo tuvieron cuatro veces más probabilidades de desarrollar diabetes que las personas con niveles normales.
Por lo tanto, además de perder peso y aumentar el ejercicio físico para reducir el riesgo de diabetes, aumentar la ingesta de vitamina E también es un importante medio auxiliar.
06. Le encanta ver la televisión y hace poco ejercicio.
Las personas que disfrutan viendo la televisión tienen un mayor riesgo de desarrollar diabetes. En comparación con los hombres que veían menos de una hora de televisión por semana, aquellos que veían entre 2 y 10 horas semanales tenían un 66 % más de riesgo de desarrollar diabetes; los que veían entre 21 y 40 horas semanales tenían el doble de riesgo; y los que veían más de 40 horas semanales tenían casi el doble de riesgo.
Este estudio demuestra que un estilo de vida sedentario, como ver la televisión durante mucho tiempo, está directamente relacionado con el riesgo de padecer diabetes.No es que la televisión en sí misma conlleve el riesgo de diabetes, sino que verla durante períodos prolongados generalmente representa una actitud y un hábito de vida típicos, es decir, consumir demasiadas calorías y hacer poco ejercicio.
Estrés laboral
El diario británico Daily Mail informó que un estudio reciente muestra que la alta presión laboral no solo provoca cansancio, nerviosismo e irritabilidad, sino que también puede aumentar la prevalencia de la diabetes en un 45% e incrementar el riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, ceguera y amputaciones. El riesgo de morbilidad también aumenta.
El Instituto de Epidemiología de Múnich, Alemania, realizó una encuesta a 5337 personas de entre 29 y 66 años que sufrían altos niveles de estrés laboral. Los datos del estudio, que duró 12 años, mostraron que aproximadamente 300 participantes previamente sanos desarrollaron diabetes tipo 2.
El profesor Karl Heinz, participante en el estudio, afirmó que la alta presión laboral se refiere a exigencias laborales elevadas, una carga de trabajo excesiva y una falta casi total de control. El exceso de presión laboral conlleva un aumento de los niveles de hormonas del estrés en el organismo, lo que altera el metabolismo de la glucosa y los lípidos y provoca un aumento de la glucemia.
08 Problemas emocionales y psicológicos
La depresión, la irritabilidad, la tensión, la ira, el pánico, la melancolía, etc., pueden afectar la glucemia. Un mal control glucémico prolongado puede afectar el estado de ánimo de los pacientes diabéticos, provocando que pierdan la confianza en el tratamiento y tengan la tendencia a abandonarlo, lo que a su vez dificulta aún más el control de la glucemia. Si este círculo vicioso se perpetúa, resulta muy perjudicial para el tratamiento de la diabetes.
Las personas con un mal control de la glucemia deben consultar a un médico para analizar las causas y encontrar soluciones. Solo cuando mejora el control de la glucemia mejora el estado mental. Ambos factores se restringen y se potencian mutuamente.
09Otras enfermedades
El control del azúcar en sangre resulta difícil durante la fiebre, las infecciones, las enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares, los traumatismos y las cirugías.
Existen muchas otras causas de niveles elevados de azúcar en sangre.
Pero no es difícil de encontrar si se busca con atención.
Se ha encontrado la razón que afecta al azúcar en sangre.
También puedes encontrar maneras de controlar el azúcar en la sangre.
Adoptar medidas contra causas específicas
Eliminar los efectos adversos
Puede ayudar a controlar el azúcar en la sangre
¿Qué deben hacer las personas con diabetes?
1. Bebe un vaso de leche al día.
Las personas con diabetes son propensas a la deficiencia de calcio, por lo que deben suplementar su consumo adecuadamente. Es recomendable beber un vaso de leche al día. Se puede optar por leche o yogur, que aportan calcio y proteínas al organismo, ayudan a reparar y regenerar las células y favorecen la salud ósea. Si la persona con diabetes tiene sobrepeso u obesidad, debe consumir leche desnatada.
2. Puedes comer frijoles todos los días
Las personas con diabetes deben consumir legumbres con frecuencia, como soja, frijoles negros, frijoles rojos, lentejas, frijoles mungo y frijoles negros. También pueden consumir cantidades adecuadas de tofu, tofu deshidratado, frijoles desmenuzados y otros productos derivados de la soja. Estos alimentos son ricos en fibra dietética y proteínas de alta calidad. Tras su consumo, proporcionan una sensación de saciedad. Además, su digestión y absorción son relativamente lentas, lo que evita picos de glucosa en sangre. El consumo regular de productos de soja aporta proteínas al organismo, mejora la condición física y ayuda a mantener los niveles de glucosa en sangre dentro del rango óptimo.
3. Consuma alimentos integrales con frecuencia.
Los alimentos integrales son aquellos que no requieren un procesamiento fino ni molienda, pero que conservan algunos de los nutrientes naturales de los cereales, como el germen y el endospermo. A este grupo se le denomina alimentos integrales.Los cereales integrales son esenciales en la vida. Existen muchos, como el arroz negro, el mijo, el arroz integral, la avena y el trigo sarraceno, entre otros. Las personas con diabetes deberían incluir estos cereales en su dieta diaria al menos una vez al día para obtener los nutrientes necesarios para 30 días. Las vitaminas y otros fitoquímicos beneficiosos para la salud pueden contribuir al control del azúcar en sangre.
4. Frutas y verduras de cinco colores
La dieta de los pacientes diabéticos debe incluir diariamente frutas y verduras de cinco colores, especialmente verduras de color oscuro, que ayudan a reducir la presión arterial, la grasa y el azúcar en la sangre. Pueden consumir con frecuencia repollo, zanahorias, berenjenas, brócoli y lechuga. Además de las verduras, también pueden comer naranjas, pomelos, arándanos, kiwis y otras frutas con moderación. Estos alimentos no contienen muchos carbohidratos y son beneficiosos para el control del azúcar en la sangre.
5. Consumir frecuentemente pescado, carne, aves y huevos.
El pescado es rico en proteínas de alta calidad. Las personas con diabetes deben consumirlo con frecuencia, preparándolo al vapor o hervido para reducir el contenido de aceite y sal. Pueden comer pescado una o dos veces por semana. También pueden consumir carne de res, cordero y otras carnes magras con moderación, evitando el consumo excesivo para prevenir fluctuaciones en el nivel de azúcar en la sangre.
6. Tratamiento farmacológico de la diabetes
La farmacoterapia es un método de tratamiento bien conocido, que incluye medicamentos orales e inyectables. Si no se logra controlar la glucemia solo con dieta y ejercicio, el médico elegirá uno o más tratamientos según la condición del paciente. Las personas con diabetes deben seguir las indicaciones médicas, tomar los medicamentos a tiempo y realizarse chequeos regulares.
El tratamiento de la diabetes es integral. El riesgo de enfermedad cardiovascular en pacientes con diabetes aumenta de 2 a 4 veces. Una intervención integral sobre múltiples factores de riesgo, como el sobrepeso/obesidad, la presión arterial, los lípidos en sangre, el tabaquismo y la proteinuria, puede reducir significativamente el riesgo de enfermedad cardiovascular en pacientes con diabetes tipo 2, así como el riesgo de morbilidad y mortalidad.